“Desde el 2006, Puerto Rico ha estado en un estancamiento económico ante la crisis financiera. Hay otros países que están peores que Puerto Rico, pero nuestro desempeño ha sido peor que otros”, expresó el economista Vicente Feliciano .
Este manifiesta su pensar cuando compara las acciones afirmativas que han hecho las cooperativas para mantener su estabilidad fiscal contrario a la práctica del gobierno central.
El abogado entiende que “las cooperativas de ahorro y crédito se mantienen en crecimiento, ya que han entrado en otro tipo de productos moderados, ponderados a pequeños negocios y préstamos hipotecarios, la mayoría en viviendas de ingreso moderado”.
Entiende que las cooperativas cuentan con factores que fortalecen su crecimiento como la naturaleza democrática de la organización, el conocimiento que tienen de sus clientes y el reconocimiento de a quiénes prestan sus recursos.
Feliciano añade: “El desempeño de las cooperativas de ahorro y crédito ha sido positivo y cuentan con una base sólida, gracias a los préstamos activos por la concentración de personas que pagan mejor que los empresarios, quienes tuvieron unas pérdidas abrumadoras”.
En cambio para mantener la solidez de sus actividades, Feliciano recomienda que “las cooperativas no entren al área de las inversiones, ya que para el movimiento cooperativista no es la mejor alternativa y pueden comprometer de nuevo el capital que tienen en las reservas”.
En el 2009, el Gobierno de Puerto Rico solicitó a las cooperativas de ahorro y crédito que invirtieran en los bonos del Estado Libre Asociado (ELA). Las consecuencias de esta inversión fue que a principios del 2014, ante la pérdida del valor de esos bonos, las cooperativas pusieron en riesgo parte de su capital.
En relación al futuro de Puerto Rico ante la crisis económica, Feliciano recomienda que se diseñe un plan a corto, mediano y largo plazo. El panorama económico a corto plazo continuará difícil, ya que para el 2015 se realizará un ajuste fiscal necesario, “difícil, pero dentro de las circunstancias, lo correcto”. El plan incluye gastos gubernamentales y aumento de impuestos.
Explica que a mediano plazo se podría ver una recuperación, ya que no dependería del consumo interno para producir como el turismo, manufactura, agricultura y aeroespacial.
El economista entiende que a largo plazo las cooperativas confrontarán unos problemas demográficos con los que tiene que trabajar. “El movimiento cooperativista es más fuerte entre las personas de mayor edad que en los jóvenes. Si bien tienen una gran cantidad de ahorro, es más complicado colocar en buenos préstamos”, concluyó.